S.O.S
10/28/2015
La belleza está en peligro de extinción.
Y no hablo de la belleza que pueden abarcar unos ojos.
Hablo de la belleza que se escapa a una mirada.
Hablo de la belleza que hay dentro de esa mirada.
Hablo de unos ojos capaces de ver el mundo
como si cada día fuera un hito inconcebible.
Hablo de los suspiros que huyen de la boca
al rozar un cuerpo incapaz de no existir.
Hablo de la sonrisa sin pincel, de la sonrisa
como inercia y no como objeto.
Y esque la belleza está en peligro de extinción.
Cada día importa más el precio de una botas
compradas sin necesidad.
Y cada día importan menos las historias
que puedan contar las huellas de esos pies desnudos.
Cada día importan más los besos robados de una boca
con sabor a tequila y desesperación.
Y cada día importa menos ese beso
cuyo único objetivo es plantar semilla y crecer.
La belleza está en peligro de extinción.
Pero aún así, todavía queda algo de esperanza
en aquellos sueños que se niegan a ser sólo leyenda.
Aún queda esperanza gracias a personas
que se mueven por impulsos imprevistos,
y no por conductas implantadas de ante mano.
Aún queda esperanza en las personas
que traducen el mundo en forma de metáfora y realidad,
en forma de escalofríos en medio de una noche de verano.
La belleza está en peligro de extinción. Es un hecho.
Pero algunos llevamos tatuada la palabra 'desafío'.
Algunos siempre veremos lo imposible como un mañana.
Por eso no has de sufrir, belleza.
Siempre quedaremos unos pocos
que creerán ( y crearán) un futuro
que solo pueda vestirse con tu nombre.
como si cada día fuera un hito inconcebible.
Hablo de los suspiros que huyen de la boca
al rozar un cuerpo incapaz de no existir.
Hablo de la sonrisa sin pincel, de la sonrisa
como inercia y no como objeto.
Y esque la belleza está en peligro de extinción.
Cada día importa más el precio de una botas
compradas sin necesidad.
Y cada día importan menos las historias
que puedan contar las huellas de esos pies desnudos.
Cada día importan más los besos robados de una boca
con sabor a tequila y desesperación.
Y cada día importa menos ese beso
cuyo único objetivo es plantar semilla y crecer.
La belleza está en peligro de extinción.
Pero aún así, todavía queda algo de esperanza
en aquellos sueños que se niegan a ser sólo leyenda.
Aún queda esperanza gracias a personas
que se mueven por impulsos imprevistos,
y no por conductas implantadas de ante mano.
Aún queda esperanza en las personas
que traducen el mundo en forma de metáfora y realidad,
en forma de escalofríos en medio de una noche de verano.
La belleza está en peligro de extinción. Es un hecho.
Pero algunos llevamos tatuada la palabra 'desafío'.
Algunos siempre veremos lo imposible como un mañana.
Por eso no has de sufrir, belleza.
Siempre quedaremos unos pocos
que creerán ( y crearán) un futuro
que solo pueda vestirse con tu nombre.
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